domingo, 18 de enero de 2015

El reto del Siglo XXI: ¡¡ Innovar en sectores tradicionales ¡¡


La Investigación, pura, es una actividad orientada a la obtención de nuevos conocimientos dentro del entramado universal de las ciencias, en términos mas simples, el investigador puro es el que investiga sin saber muy bien que es lo que encontrará.
 
La tecnología es la función consistente en aplicar los resultados de la investigación y, en los casos en que se pueda, desarrollarlos y transformarlos en bienes y servicios útiles a la comunidad, dicha actividad es ya por si misma innovadora..

¿Qué es entonces la innovación a secas?

Innovar es realizar productos o servicios de manera diferente a como se han realizado en el pasado, pero, y lo más importante, generando un nuevo valor añadido.

¿Por qué es tan importante y está tan de moda el innovar?

La respuesta está en la rentabilidad que esperamos encontrar los inversores sobre la inversión que realicemos.

El hecho de replicar modelos de negocio actuales mejorándolos en algunos aspectos, solo hará que se aumente la competitividad entre empresas, que ya es bueno, pero probablemente sea insuficiente de cara a las expectativas de rentabilidad de un inversor.

Un proyecto empresarial que mejore sustancialmente a otro parecido puede hacer que con esta diferenciación se capten más clientes, o clientes existentes compren más, o se genere mayor fidelización, y estos hechos probablemente hagan aumentar algún punto la rentabilidad del negocio, pero lo que realmente esperamos los inversores, seamos inversores privados o fondos de capital riesgo, es que el modelo de negocio en el que invirtamos genere una rentabilidad muy superior a las rentabilidades medias que generan las empresas convencionales, y esto solo puede conseguirse con modelos de negocio innovadores, que generen nuevos mercados y estos, grandes rentabilidades al no tener los frenos que tienen los mercados cuyos productos y sus precios pueden comparase con facilidad.

Así las cosas, difícilmente conseguiremos atraer a un inversor con un proyecto que solo mejore la competitividad y que esta mejora solo haga aumentar algunos puntos la rentabilidad del proyecto en comparación con otras empresas del mismo sector

Las altas rentabilidades generadas por negocios innovadores hacen también atractiva la inversión por la posibilidad que tienen de generar plusvalías las acciones adquiridas por el inversor a través de su inversión en el proyecto, así el inversor siempre tiene la posibilidad de vender sus acciones a una empresa mayor que pueda adquirir a la empresa innovadora una vez esta haya materializado sus objetivos y conseguido los hitos previstos.

Pero ¿dónde encontramos los caminos de diferenciación entre lo que está hecho hasta ahora y lo que se puede hacer generando esa buscada diferenciación y ese valor añadido?.

Describo a continuación una síntesis del estudio realizado por el comité de bioética de la UNESCO sobre la Transgresión como elemento de innovación.

 La transgresión; sin dudas, es inicialmente considerada el límite, como la línea final que circunda el espacio de lo permitido dentro de cada práctica social y profesional. Acercarse a los mismos contornos coloca a los practicantes ante el vértigo de lo que está más allá y ante la amenaza de sanción si a ello se accede (la mala práctica, la interdicción, lo demonizado). No obstante, se revelará que esta consideración tiene la estructura de un verdadero problema: no dejará de indicar las fronteras del propio campo legalizado, pero sólo podrá mantenerse a fuerza de ser puesta en cuestión, revelando la materia que la ha construido. Por ello, se enfatizará sin dudas esta otra cara radical: es una verdadera y completa condición dentro de la ética su violación y desplazamiento, para fundar sobre ella el progreso de la ciencia, la técnica y las tecnologías consecuentes.

La transgresión es una “conditio sin equa non” de la ética; demonizada aunque necesaria,, presente pero velada, inviolable aunque deslizable, y de ella no se puede prescindir.

Sin un fenómeno transgresor los grandes cambios sociales no se hubieran producido, la mujer actual del siglo XXI seguiría siendo una persona destinada a las labores domésticas si alguien no hubiera transgredido el establishment de mediados del siglo XX

Así pues, hay una tremenda similitud en el concepto de la innovación y el término transgresión, consecuentemente la innovación pasa por el camino de hacer las cosas de manera diferente a los usos y costumbres,

En la historia del mundo, la innovación ha estado siempre íntimamente ligada a los grandes cambios sociales y en muchas ocasiones ha partido de la transgresión de unos usos y costumbres determinados, fundamentalmente la innovación como generadora de cambio no siempre ha sido fácil de asumir por los estamentos sociales establecidos en cada época y en cada lugar geográfico donde los dichos cambios se producían.

El siglo XX ha sido realmente el siglo de mayor concentración de innovaciones en los distintos aspectos de la industria, de la medicina y de la sociedad de la información y las comunicaciones, sensibilizando a los estados y a los ciudadanos de la importancia de la innovación como elemento fundamental de desarrollo y de competitividad, aunque este concepto haya calado con mayor arraigo en unos países que en otros.

Durante muchos años en el mundo no se ha relacionado la innovación con la tecnología, véase como antiguamente solo se podían amortizar en el balance la famosa I+D (Investigación y Desarrollo) que posteriormente fue la I+D+It (Investigación, Desarrollo e Innovación tecnológica), actualmente, en la mayoría de países industrializados puede amortizarse en el balance todo el gasto de Innovación a secas (siempre y cuando se aporte una memoria en la que se establezcan perfectamente las bases de la innovación, y puedan ser contrastadas en un proceso de auditoría).

Sin embargo, todo y que desde las administraciones, en teoría, parece que se apoya la innovación, hay grandes lagunas en la materialización de este teórico apoyo y que debe todavía seguirse trabajando para impulsar desde las instituciones el crecimiento fundamentado en la innovación

Básicamente, las definiciones de Innovación que hasta ahora han propiciado organismos y universidades parecen demasiado vinculadas a sectores tecnológicos “de moda”, y reflejan la falta de conciencia que existe en nuestra sociedad a la hora de vivir la innovación, pues dejan fuera enormes campos de desarrollo empresarial.

No supone dificultad aplicar tales criterios a sectores y desarrollos de alto valor tecnológico, pues socialmente está aceptado y es incluso intuitivo. Sin embargo, existen “otras” innovaciones en sectores tradicionales con gran potencial de mercado que no parecen encajar en las definiciones al uso.

Por ende, también a la banca y a las instituciones financieras les resultaba hasta ahora harto difícil evaluar un proyecto innovador ya que carecían de los medios para evaluarlo habituados solamente a valorar los convencionales proyectos inmobiliarios, actualmente con los modernos sistemas de evaluación de proyectos (due diligences de la innovación, y planes de negocio) incluso para la banca es más fácil estudiar los riesgos y beneficios de proyectos de innovación.

Este proyecto que presento hoy en el blog, es una muestra de cómo un concepto innovador en un sector tan tradicional como es el sector editorial, no solo puede dar muy buenos resultados empresariales, si no lo que es más importante para el objetivo de éste blog es demostrar que puede actuar perfectamente como catalizador de inversiones de inversores terceros.

 


 
Estamos en una situación global en la que la Innovación y solo la innovación puede seducir al mundo, los gobiernos necesitan de la innovación para asentar las bases de la sostenibilidad de los países, los inversores necesitan vías de rentabilidades futuras que ahora no ofrecen los mercados organizados ni los eternamente rentables mercados inmobiliarios, el paradigma mundial ha cambiado y solo el gen innovador es sintomático de crecimiento sostenible, la innovación en cualquier sector de actividad se ha convertido en la clave no solo del desarrollo sino del acceso a la financiación